domingo, noviembre 20, 2005

ASUPARK: UN CIRCUITO, PURO ESPECTÁCULO…

Asupark, un circuito, puro espectáculo...
 
Miles de personas se congregaron el sábado en una mañana que presagiaba lluvia, para disfrutar una jornada más del circo de la K1.
Numerosas eran las bajas para esta jornada, bien por sanción (Mario fue advertido por su maniobra un tanto atropellada ante el ferrari de Rubinho en la gran final de Carlos Sainz) bien por problemas mecánicos como Carlos Isidro, Jorge Elliot o el McLaren de "El Sueco".

La primera manga clasificatoria la componían Magüe y David (debutantes), Vicente, Nigel, J.J. Massa, F. Clua, Rustu y Christian Ralf.
Esta parrilla sin duda deparaba ya espectáculo, porque tan sólo cuatro plazas se  disputaban y seis pilotos mostraban ya su candidatura, dos de ellos haciendo podio en la jornada anterior.
La salida era lanzada, el coche oficial iba marcando las posiciones, hasta llegar a la curva de boxes, donde comienzan a rugir los motores de los monoplazas. La primera curva se tomaba a poca velocidad por Magüe, que provocaba un pequeño tapón en el grupo perseguidor. David aguantaba el envite de sus perseguidores, aunque el Williams de Vicente, muy dolido por su última actuación en el Gran Premio Carlos Sáinz, se colocó en el rebufo esperando la oportunidad de adelantar… Con una hábil maniobra se cuela en la trazada de la curva de final de recta, subiéndose al piano, y pasando de manera brillante a la primera posición. ¡Por un lugar imposible el Williams se coloca primero en su manga! Por atrás los monoplazas sufren el tapón de los pilotos debutantes, y la chicane sirve para que J.J. Massa adelante y se coloque segundo en la ronda. La distancia que iba marcando el Williams era ya insalvable para el resto de pilotos, y J.J. rodaba en solitario. Por atrás el Toyota de Rustu se veía inmerso en una colisión en cadena que le relegaba al último puesto. Atención porque esto suponía un duro revés para la escudería.  Mientras el escollo de los pilotos debutantes era salvado por Nigel y Ralf, que luchaban por un puesto en la final, jugándosela en cada curva. El ferrari rodaba en mejores tiempos que el Bar-honda, y aprovechando una  mala frenada de Nigel, se colaba por el interior de la curva colocandose en tercera posición.  Los puestos en la final tenían ya dueño, aunque la emoción de la manga la puso el Toyota de Rustu, que superando el percance venía imparable en busca de la cuarta plaza. El Bar-honda temblaba en la última vuelta donde el Toyota le pisaba los talones. El ruido del motor rugía tras el Honda, que no podía cometer ni un error más… La emoción estaba servida y hacía las delicias de los espectadores, aunque el banderazo de meta colocaba a Nigel en la final.


La segunda manga clasificatoria situaba los bólidos de Sauber, McLaren, Williams, Ferrari, Toyota, Bar-Honda y Red Bull sobre el piso, pendientes del banderazo de salida tras el coche guía. Comenzó la carrera con una aglomeración de karts en la primera curva, trazando un interior a izquierdas y una a derechas. Los vehículos encaraban la recta intentando buscar la mejor posición para tomar la curva. Numerosos choques se sucedían con los monoplazas impactando sobre las protecciones del circuito, porque desde atrás, los vehículos mucho más rápidos que el Sauber de David, o el McLaren de Losada, intentaban buscar la cabeza de carrera. En una maniobra accidentada, Dani, que partía como favorito desde la última plaza, intentaba rebasar a Luiggi Rodado en una acción que casi provoca la colisión de este último con el Toyota de Jefecillo, mientras el Ferrari de Rubinho se veía mermado por una serie de problemas mecánicos y era rebasado fácilmente en las rectas. A pesar de pilotar en inferioridad de condiciones el "caballino rampante" peleaba por un puesto en la final.
La cabeza de carrera se la disputaban David y Losada, con D. Martínez a rebufo esperando un fallo de los anteriores cuando se llegaba a la chicane, sin embargo una gran acción de Jefecillo que había adelantado a Rubinho sin problemas, dejó a los espectadores boquiabiertos, y generó los primeros grandes aplausos de la temporada, tras colarse como una bala por el hueco que dejaban los primeros, colandose de una tacada en primera posición liderando la manga. Por atrás los monoplazas se las tenían que ver con Sauber y McLaren, mientras dejaban atrás a Willliams.
Jefecillo rodaba en solitario sobre el asfalto de Asupark, mientras aumentaba la ventaja sobre sus perseguidores debido al tapón de Sauber, apuntándose una de las plazas para la final.
Rodando fiel a su estilo, Dani al volante de Red Bull consiguió desembarazarse de los monoplazas que obstaculizaban la carrera y siguió la estela de Jefecillo, consiguiendo pole en la última vuelta. Luiggi Rodado tuvo que emplearse a fondo para ganar la tercera plaza y Rubinho hizo maravillas para situar su mermado bólido a la estela del Bar-Honda, y conseguir meterse, gracias a un gran pilotaje, en la final.

Solo quedaban por decidirse dos plazas, y la repesca no deparó grandes sorpresas. El Toyota de Rustu volaba sobre la pista, mientras Clua permanecía a su rueda. Losada mantuvo las distancias hasta la cuarta vuelta donde se descolgó. No hubo rivales. Toyota conseguía la novena plaza de la final y Minardi la décima configurando la Gran Final de Asupark.

El espectáculo estaba servido, y el nutrido grupo de espectadores disfrutaba del choque que colocaba a Williams en la primera parrilla de salida, junto con Red Bull. Por atrás J.J. Massa (que daba la sorpresa), Jefecillo, Ralf, Rodado, Nigel, Rubinho, Rustu y Clua conformaban el resto de parrilla. El banderazo de salida colocaba al Williams en la primera posición, seguido del Red Bull de Dani. Pronto se hizo un hueco con el Sauber de J.J. Massa y todos los vehículos que venían por atrás sufrían las embestidas de los pilotos mas duros que buscaban sus minutos de gloria en la gran final. Los monoplazas mas afectados por los toques sufridos fueron los Toyota  y el Ferrari de Rubinho.
Los hermaníssimos Arcos volvían a sufrir nuevamente las inclemencias de la diosa fortuna y rodaban muy por debajo de sus posibilidades. A partir de este momento la carrera cambiaba de cariz, porque Jefecillo rompió el sistema de inyección en el motor y si quería puntuar debía aguantar en esas pésimas condiciones, Rustu peleaba por no quedarse relegado a la última posición y Rubinho se mantenía en carrera gracias a su gran pilotaje y del espectáculo que suele ofrecer en todas las curvas. Por su parte, el compañero de Ferrari, Ralf, aprovechando el momento, superó a Jefecillo en la recta del circuito, mientras Rodado colocándose a rebufo, ganaba la posición en la entrada de curva superando también a Massa. Nigel, con un bólido que se mostraba intratable superaba en la chicane a los vehículos mermados, dejando la carrera a placer para los Williams, Red Bull, Ferrari y sobre todo para los Bar-Honda, que estaban causando sensación en esta gran final. Vicente se mostraba muy sólido en la primera posición y volaba hacia el primer puesto, reivindicando su opción a revalidar el título este año. Por detrás el Red Bull de Dani sufría un nuevo problema mecánico. Los errores en boxes estaban determinando la carrera. Los técnicos y mecánicos tendrán que trabajar duramente esta semana para mejorar el rendimiento de los monoplazas afectados…

La carrera estaba sentenciada por Williams que rodaba a placer, mientras por atrás, los Bar Honda empujaban al ferrari de Ralf, hasta que se vio superado por Luiggi en una maniobra imposible sobre el piano de la curva de entrada a meta, y se veía acosado por Nigel, al que la fortuna del vehículo número 10 le sonreía.

Por atrás, Dani aguantaba los envites de J.J. Masa sin duda preocupado por el rendimiento de su monoplaza que lo privaba de subir al podio, seguido de Jefecillo que luchaba encarnizadamente con Rubinho, para defender la séptima plaza. Por atrás Rustu veía decepcionado como su vehículo era rebasado por Clua, sin poder presentar batalla.  La última vuelta deparaba siempre emoción aunque los monoplazas de cabeza habían echado las cartas mucho antes y habían decidido la carrera de un plumazo. Sin embargo la zona de atrás mostraba una lucha feroz entre Jefecillo y Rubinho, que nos suelen deleitar con grandes maniobras y adelantamientos espectaculares en todos los grandes premios, y esta vez no iba a ser menos. Quedaban diez curvas, la tensión se mascaba en el ambiente, cuando, en una curva imposible, justo antes de boxes, Rubinho colaba el morro y apuraba mucho más la frenada colocándose en la séptima posición por delante de Jefecillo. Un sonoro aplauso resonó en todo el circuito, con numerosos aficionados ondeando las banderas rojas. La respuesta no se hizo esperar y en la recta del circuito Jefecillo se colocó en paralelo al Ferrari, llegando al final de recta por el interior, justo por el lado bueno de la curva, apurando la frenada, cerrando el paso al ferrari en la trazada y ganando así de nuevo la séptima plaza, con las protestas airadas del piloto de Ferrari que consideraba el adelantamiento como una jugada sucia. Sin embargo Clua que llegaba desde atrás se colocaba junto al ferrari, y en una pasada de curva chocaba con el caballino, marchándose los dos fuera del circuito, deteniéndose sus monoplazas. Rustu desde atrás  observaba como ferrari y minardi eran "ayudados" por la organización, empujados y devueltos a carrera. Pero era demasiado tarde, porque Vicente alzando los brazos pasaba por línea de meta ganando una carrera que dominó de principio a fin sin problemas, seguido de Luiggi Rodado, que en silencio había colocado su monoplaza en el segundo peldaño del cajón y Ralf, que por segunda semana consecutiva hacía podio, y presentaba una seria candidatura al campeonato de este año.
En cuarta posición entraba el Bar-Honda de Nigel, seguido de Dani, que se lamentaba del fallo mecánico, J.J. Massa, con cinco puntos en este gran premio, Jefecillo que se colaba en séptima posición, con Rubinho en octava y Clua noveno, que a pesar de su  inexperiencia puntuaba por segunda vez consecutiva. En último lugar entraba Rustu, que veía como la organización y los jueces sancionaban a los pilotos ayudados en pista, otorgándole el octavo puesto, relegando a Rubinho a la novena posición y a Clua a la décima.

Un gran premio marcado por la polémica, y sobre todo, protagonizado por los numerosos problemas mecánicos, que cumplió con las expectativas y deleitó a los aficionados congregados en Asupark, mientras se otorgaban los trofeos con Ralf en el tercer peldaño, Luiggi Rodado en el segundo y Vicente que subía a lo mas alto del cajón.

Desde Asupark, bajo un cielo nublado, les emplazamos ya al tercer gran premio de la temporada "G.P. de Xanadú" , con la esperanza de que nos depare un nuevo espectáculo como el de hoy.

Jefecillo.

 

2 Comments:

Blogger piloto k1 said...

IMPRESIONANTE!!!!!

Un Gran Premio de escandalo sin lugar a dudas y una cronica digna de Pullitzer!

Nunca podre quitarme de la cabeza aquella estampa de la aprimera manga clasificatoria, en la que Rustu parado en medio de la pista aporreaba lentamente el volante de su monoplaza, maldiciendo a la diosa fortuna......TERRORIFICO!!

2:06 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Bravo Jefecillo!!!
Tras una primera crónica de la temporada que no dejo satisfechas a todas las escuderías (mención especial al descontento mostrado por Ferrari en ésta web), en ésta segunda entrega te lo has currado y reflejas bastante bien (todavía tienes pezqueñas lagunas...) lo acontecido el pasado sábado. Te animo a seguir en ésta línea editorial, más objetiva y veraz y alejar la sombra de periodista URDACIANO.
N.I.G.E.L.

1:47 p. m.  

Publicar un comentario

<< Home

Web Site Counter

Web Site Counter
Web Site Counter
Web Site Counter

Web Site Counter
Web Site Counter

Web Site Counter


Web Site Counter
Web Site Counter
Web Site Counter


Web Site Counter